Juliete Cabrera, luego de ser expulsada ante millones de televidentes, es sin duda la primera “reina sin corona” de Nuestra Belleza Latina, luego de protagonizar el escándalo más grave en la historia de cinco años del reality show de Univision.
Y aun cuando es un hecho que no tendrá, según el show , la corona de la latina más bonita, si podría aspirar a un millonario premio muy superior al de 250 mil dólares que ganaría de decidirse a demandar a Univision por exponerla públicamente a una vergüenza injustifica.
Antecedentes: Juliete Cabrera antes de adicionar y ser aceptada en Nuestra Belleza Latina, posó con diminutos bikinis y en poses muy reveladores para revistas de caballeros.
Reglamento de Nuestra Belleza Latina: En uno de los párrafos del convenio firmado por todas las participantes, indica que no las concursantes no deben de haber estado en situaciones “objetables”.
Hechos: La producción de Nuestra Belleza Latina prácticamente obliga a las chicas a realizar actividades y aceptar situaciones aun en contra de su voluntad, como permanecer “incomunicadas” durante el proceso del concurso, realizar movimiento eróticos un “pole dance” (baile del tubo) o recientemente, peses a sus fobias, rodearse de animales exóticos y bajar colgadas de una soga a desde 30 piel de altura.
Es un hecho que la ambición de las chicas a hacer una carrera artística “me cueste lo me cueste”…y eso es lo que hizo Juliete Cabrera, aun cuando posó casi desnuda, lo no hizo ante millones de espectadores, ni cobró millones a patrocinadores ni por mucho menos pidió a terceros a obrar en contra de su voluntad.
Además, en la propio portal de Univision.com, en una encuesta realizada indicó que 51% de las personas no están de acuerdo con su expulsión.
Reglas, son reglas, dijo Julián Gil en el último show de Nuestra Belleza Latina 2011, pero entonces ¿Dónde están las garantías individuales de las chicas participantes? Un buen bufete jurídico tendría muy buenas respuestas para Juliete Cabrera.
ENELBRASERO
