Nueva York. Un jurado halló hoy culpables a tres hombres de haber forzado a mujeres indocumentadas latinoamericanas a ejercer la prostitución en dos establecimientos en Long Island, informó la Fiscalía del Distrito Este de Nueva York.
Dos de los acusados, Antonio Rivera y Jason Villaman, se enfrentan a una pena máxima de cadena perpetua, y el tercero, John Whaley, a 20 años de prisión, una vez que dicte sentencia la juez del caso, Sandra Feuerstein.
Según la acusación, las inmigrantes, procedentes de Honduras, Guatemala, México y El Salvador, eran obligadas a mantener relaciones sexuales con clientes de los bares “ Sonidos de la Frontera ” y “ La Hija del Mariachi ” , ambos propiedad de Rivera y donde eran contratadas como camareras.
El peso de ley recaerá sobre todos aquellos que exploten a gente vulnerable en su propio beneficio ” , dijo la fiscal del caso, Loretta Lynch. “ Nos aseguraremos de que todo el mundo reciba la máxima protección de nuestras leyes ” , añadió en un comunicado.
La Policía del condado de Suffolk afirmó tras conocer el fallo que este caso envía un mensaje a las inmigrantes sin papeles que estén siendo explotadas. “ Si dan un paso al frente las protegeremos ” , afirmó el jefe policial Richard Dormer.
El asistente del fiscal, Thomas Pérez, denunció en ese mismo comunicado que el tráfico de personas es el equivalente a una forma de “ esclavitud moderna ” , ya que “ priva a las víctimas de su libertad y dignidad, y eso no tiene lugar en este país ” .
EFE