La normalidad ha retornado a la República Dominicana luego del alboroto y el temor cuando un temblor de tierra remeció a todo el país a las 5:35 de la mañana.
El temblor tuvo su epicentro en San José de Ocoa a diez kilómetros de profundidad con una magnitud de 5.3 en la escala de Richter.
El Centro de Operaciones de Emergencias llamó a la población a mantener la calma ya que no había amenazas de tsunami ó maremoto.
Cientos de personas salieron despavoridas a las calles, muchas en ropa de cama.
El síndico de Azua dijo que se produjeron derrumbes de tierra en El Número, pero que ya las autoridades están despejando los escombros para que se reanude el tránsito.
El síndico de Palmar de Ocoa, Pedro Méndez, dijo que las calles de ese municipio se nublaron de gente, pero que gracias a Dios no hubo daños materiales ni humanos.
En tanto, el alcalde de Baní, de la provincia Peravia, Chacho Landestoy, precisó que solamente hubo un gran susto.
Los dominicanos hacen anécdotas sobre lo que hicieron al darse cuenta de que estaba temblando la tierra.
