El CEO de la compañía, Eric Schmidtt, repartió halagos para su director de marketing para Medio Oriente, Wael Ghonim, preso 12 días por el régimen de Mubarak y héroe de la revuelta
Por primera vez, Google habló de su directivo que se transformó un líder 2.0 en un país que fue centro del mundo por 18 días.
Schmidtt destacó la experiencia en redes sociales de Ghonim que ayudó a revivir la protesta anti Mubarak cuando parecía que el régimen resistía el reclamo social por reformas y retenía el poder. Sus lágrimas en un programa de TV tras ser liberado por presión de los EEUU, impulsaron a millones de egipcios a volver a las calles.
"Es un ejemplo de que la tecnología beneficia a las masas en vez de sólo a una élite", dijo el CEO de Google. "Así mucha gente puede acceder a más información de lo que realmente pasa", agregó
Ghonim inició su campaña contra Mubarak con la creación de una página en Facebook a favor de las protestas que fue sumando adeptos día a día.
La importancia de Ghonim todavía se mantiene. Su cuenta en Twitter es una de las más leídas de Egipto y para muchos sirve para tener la mejor información de lo que pasa en el país. Luego de la renuncia de Mubarak, se reunió con la junta militar que tomó el poder y al salir declaró: "Confío en el ejército".
Es tal su influencia y liderazgo, especialmente en la base joven y urbana que gestó la revolución, que su nombre es barajado por algunos analistas como posible candidato a presidente para las próximas elecciones.
Para Google tampoco fue fácil. Su nombre y prestigio corporativo estuvo envuelto en un grave conflicto en Medio Oriente. Egipto es, además, su principal mercado en la región.
infobae