Los choferes del transporte colectivo rechazaron el viernes las restricciones a su trabajo impuestas por el gobierno como parte de un plan de austeridad para mitigar las alzas en los precios del petróleo.
El presidente Leonel Fernández anunció la noche del jueves que los vehículos del transporte colectivo sólo podrán circular de forma interdiaria a fin de ahorrar combustible y reducir la importación de hidrocarburos.
"Eso es imposible", indicó a la AP Ramón Pérez Figuereo, líder de la Central Nacional de Transportistas Unificados (CNTU), que agrupa a varios sindicatos de conductores.
Pérez Figuereo aseguró que "ningún transportista resiste" permanecer sin trabajo la mitad de la semana debido a que el uso de sus vehículos representa su única fuente de ingresos.
Muchos de los choferes, recordó Pérez Figuereo, adquirieron sus vehículos con créditos bancarios que aún no han terminado de pagar, por lo que no pueden descansar de forma interdiaria.
Fernández también anunció la eliminación de un antiguo programa de subsidio que beneficiaba a unos 10.000 choferes con un bono de 3.420 pesos (90 dólares) mensuales para la compra de gas licuado de petróleo, principal combustible de sus vehículos.
El mandatario se comprometió a crear un programa de ayuda financiera para que los choferes adapten los motores de sus vehículos a fin de que utilicen combustibles no derivados del petróleo.
Las medidas tienen como meta reducir la dependencia del petróleo, ya que le país carece de yacimientos petroleros e importa unos 155.000 barriles al día. LEER MAS
