| Comisión con las “manos atadas” |
Santo Domingo, R.D - Las canciones que resaltan mensajes explícitos y en otras de doble sentido, sobre violencia, sexo, drogas y otros temas ha vuelto a ser fuente de crítica de varias entidades sociales que ayer pidieron a la Comisión Nacional de Espectáculos Públicos y Radiofonía la inmediata intervención en el examen y monitoreo de las letras de estos cortes.
Pero la respuesta del organismo regulador no pudo ser más desalentadora, al declararse incompetente para sacar del aire las canciones que incitan a la violencia, sexo, droga y afectan la moral de la mujer.
Su presidente, José Miguel Hidalgo, dijo que esa entidad carece de sistema de monitoreo y del personal necesario porque no cuenta con los recursos económicos para su instalación.
Durante una visita al presidente de la Comisión de Espectáculos Públicos, Yanira Fondeur de Hernández y Soraya Lara de Mármol, representante de la Fundación Vida Sin Violencia y del Patronato de Ayuda a Casos de Mujeres Maltratadas, respectivamente, mostraron su preocupación por la difusión de canciones con mensajes que “incitan a conductas violentas de sus oyentes, en su mayoría niños, niñas y adolecentes”.
Temas como “Me hacen goló, goló”, de Pablo Piddy; “Toy quillao”, de Secreto; “Si me pega los cuernos te lo pego”, de Milka, y “Vamos a portarnos mal”, de Calle 13, son algunos de los sencillos que citaron “que promueven la violencia, que denigran a la mujer y atentan contra la moral y las buenas costumbres”.
Las organizaciones pidieron hacer valer los artículos 84, 123 y 125 de la Ley 1951 que otorgan competencia a la Comisión para prohibir “toda transmisión que cause corrupción del lenguaje o sea contraria a las buenas costumbres por contener expresiones maliciosas, frases de doble sentido, palabras o imágenes perversas, apología del crimen o la violencia y todo aquello que sea denigrante a cualquier persona”.
“Tenemos conocimiento de investigaciones que determinan que escuchar música con letras violentas puede causar un aumento, al menos temporal, de los pensamientos y sentimientos agresivos, que desencadenan en reacciones agresivas y son asumidas como normal, ya que la población infantil y juvenil tiende a fácilmente imitar o copiar ciertos patrones de conductas”, expresaron las entidades en una carta entregada al presidente de Espectáculos Públicos.
“En virtud de la competencia que tiene la Comisión Nacional de Espectáculos Públicos y Radiofonía solicitamos su intervención para el examen y monitoreo de las letras de canciones que constantemente se escuchan en nuestros medios de comunicación, cuyos mensajes se almacenan inconscientemente en el cerebro, provocando cambios negativos en la conducta”.
Su presidente, José Miguel Hidalgo, dijo que esa entidad carece de sistema de monitoreo y del personal necesario porque no cuenta con los recursos económicos para su instalación.
Durante una visita al presidente de la Comisión de Espectáculos Públicos, Yanira Fondeur de Hernández y Soraya Lara de Mármol, representante de la Fundación Vida Sin Violencia y del Patronato de Ayuda a Casos de Mujeres Maltratadas, respectivamente, mostraron su preocupación por la difusión de canciones con mensajes que “incitan a conductas violentas de sus oyentes, en su mayoría niños, niñas y adolecentes”.
Temas como “Me hacen goló, goló”, de Pablo Piddy; “Toy quillao”, de Secreto; “Si me pega los cuernos te lo pego”, de Milka, y “Vamos a portarnos mal”, de Calle 13, son algunos de los sencillos que citaron “que promueven la violencia, que denigran a la mujer y atentan contra la moral y las buenas costumbres”.
Las organizaciones pidieron hacer valer los artículos 84, 123 y 125 de la Ley 1951 que otorgan competencia a la Comisión para prohibir “toda transmisión que cause corrupción del lenguaje o sea contraria a las buenas costumbres por contener expresiones maliciosas, frases de doble sentido, palabras o imágenes perversas, apología del crimen o la violencia y todo aquello que sea denigrante a cualquier persona”.
“Tenemos conocimiento de investigaciones que determinan que escuchar música con letras violentas puede causar un aumento, al menos temporal, de los pensamientos y sentimientos agresivos, que desencadenan en reacciones agresivas y son asumidas como normal, ya que la población infantil y juvenil tiende a fácilmente imitar o copiar ciertos patrones de conductas”, expresaron las entidades en una carta entregada al presidente de Espectáculos Públicos.
“En virtud de la competencia que tiene la Comisión Nacional de Espectáculos Públicos y Radiofonía solicitamos su intervención para el examen y monitoreo de las letras de canciones que constantemente se escuchan en nuestros medios de comunicación, cuyos mensajes se almacenan inconscientemente en el cerebro, provocando cambios negativos en la conducta”.
POR JOSÉ NOVA el caribe
