Al menos 53 personas fueron asesinadas en un terrible ataque lanzado por un comando armado la tarde del jueves contra el Casino Royale de Monterrey, en norte de México, que derivó en un fuego que asfixió a las víctimas, informó el gobernador del estado de Nuevo León.
El establecimiento, ubicado en la Avenida San Jerónimo de Monterrey, quedó envuelto en llamas después de sufrir un atentado del crimen organizado, el más cruento de los ocurridos en México. Por el momento se desconoce el saldo definitivo de víctimas de la acción criminal, que por sus características es atribuible a los cárteles de la droga que se disputan el control de la ciudad.
Según datos ofrecidos por el gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina, seis sujetos armados que llegaron al lugar a plena luz del día y accedieron al inmueble, bloquearon sus puertas y rociaron el Casino Royale con un líquido inflamable, probablemente gasolina.
Entonces le prendieron fuego y en pocos minutos el lugar se vio envuelto en llamas y se convirtió en un infierno que tardó varias horas en ser apagado. Aunque las primeras versiones apuntaban a que en la acción criminal se utilizaron ametralladoras y se escucharon detonaciones, lo que hasta el momento está confirmado es que el local quedó envuelto en llamas por la rápida propagación del fuego.
Hasta el momento está confirmada la muerte de más de cincuenta personas, aún sin identificar, pero podría haber decenas más entre los escombros calcinados.
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