El Centro Nacional de Huracanes, con sede en Miami, apuntó que el meteoro podría provocar una marejada ciclónica “potencialmente mortal” en partes de la costa del golfo. Esto ha provocado que se active un aviso por fuerte oleaje para la zona entre Shell Beach, en Louisiana, y Dauphin Island, en Alabama, lo que podría provocar inundaciones peligrosas.
La región podría sufrir crecidas de entre 0,9 y 1,5 metros (entre 3 y 5 pies), y en varias partes de los estados del golfo se esperan hasta 20 centímetros (8 pulgadas) de lluvia hasta el jueves en la noche.
El gobernador de Louisiana, John Bel Edwards, declaró el estado de emergencia este lunes y dijo que se movilizarán 200 soldados de la Guardia Nacional al sureste del estado.
Por su parte, el alcalde de Grand Isle, David Campardelle, exhortó a evacuar voluntariamente la isla, que se encuentra en el Golfo y pertenece al estado de Louisiana. Señaló que tramos de la Ruta 1, la única que conecta la isla con tierra firme, estaban en reparación y que esto podría causar “problemas graves” a quienes intentaban evacuar. “El que se va, debe hacerlo antes de que se inunde la ruta”, añadió el alcalde.
Gordon se formó cerca de los Cayos de Florida este lunes temprano y descargó fuertes lluvias y vientos en la parte sur del estado antes de desplazarse al Golfo de México.
Este martes en la mañana el vórtice del meteoro estaba a 235 kilómetros (145 millas) al este-suroeste de la desembocadura del río Mississippi. Los vientos máximos sostenidos de Gordon alcanzaban los 100 km/h (65 mph) y se prevé que alcance hasta los 120 km/h (74 mph).
