El esposo de Gisela Rioja fue el lunes a trabajar y jamás regresó.
Después de una interminable noche de búsqueda en el lugar en el que se derrumbó parte de la Línea 12 del metro de Ciudad de México y tras preguntar en varios hospitales de la zona, Gisela lo encontró donde no quería encontrarlo, en la morgue.