"Alfonso Cano está muerto", había arriesgado La Silla Vacía, un portal de noticias de referencia en Colombia. "El Ejército lo dio de baja en el cañón de Las Hermosas. Es un zona ubicada al suroeste del departamento del Tolima de muy difícil acceso y por ello durante más de una década fue el primer sitio donde se escondió 'Tirofijo', después de la formación de las FARC".
La misma versión había circulado en otros portales y en Twitter durante horas. Era un rumor de alto impacto: se decía que las Fuerzas Armadas habían acabado con el máximo líder de la guerrilla. Se informaba sobre intensos combates en la alta cordillera de San José de las Hermosas, bastión histórico de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
Se hablaba con lujo de detalles. Que había dos soldados heridos y que el mal clima impedía trasladar a otros dos. Que el refugio de Cano había sido bombardeado, que no había sobrevivientes y que los soldados "peinaban" el área para encontrar su cadáver. La Silla Vacía citaba a fuentes del ministerio del Interior, de Defensa, del Ejército, de las tropas en el Tolima y de la propia guerrilla.
Pero todo fue desmentido por el Gobierno de Juan Manuel Santos. El Comandandte del Ejército, Alejandro Navas, aseguró que cuando comenzaron los rumores llamó a todos los batallones y que todas las divisiones negaron que hubieran dado de baja al jefe de las FARC. Afirmó que ni siquiera había habido combates en el cañón de Las Hermosas. Leer mas