Asesino de John Lennon Transferido a Prisión de Máxima Seguridad

Por Peralta Delgado
Mark David Chapman, el asesino de John Lennon, es transferido a prisión de máxima seguridad. Sin embargo... ¡buscará por séptima vez su libertad!



Muchos recordaremos siempre que fue el 8 de diciembre de 1980 cuando, con toda alevosía y ventaja, este hombre disparó al ex Beatle en el Edificio Dakota de Nueva York. El criminal esperó a la policía y se declaró culpable. Su sangre fría, su cinismo, descubrir una planeación tan metódica como absurda para asesinar a quien le cantaba a la paz, no complicaron nada darle condena de 20 años a cadena perpetua de cárcel. Simple y sencillamente quería hacerse famoso por matar a Lennon. ¡Lo sigue siendo: lleva 31 años gozando esa fama en la cárcel! ¡Buen provecho, parece que valió la pena!

En el año 2000, Mark David Chapman, el asesino de John Lennon, ya había cumplido los 20 años de prisión impuestos en la Correccional de Attica. Una y otra vez pidió libertad condicional que le fue negada haciendo efectiva una condena vitalicia. Yoko Ono, por supuesto, siempre se ha opuesto temiendo por su vida y la de sus hijos y ha sido determinante para seguir dejándolo en la sombra.



Varios medios están publicando que el preso fue transferido ayer de la Correccional del Attica a la Correccional de Wende, ésta última es prisión de máxima seguridad en Nueva York. A 31 años de cárcel y con 57 años de vida, según la misma fuente, el inculpado planea la séptima petición de libertad condicional en agosto de este 2012.

¿Por qué fue trasladado? Las autoridades no quisieron dar las razones, aunque nos hace suponer que su solicitud de libertad condicional ¡no parecería tener mayor esperanza al ser trasladado a una prisión de máxima seguridad! David Chapman, "El asesino de John Lennon", como siempre quiso y será recordado, ha pasado más de la mitad de su vida -y su fama- encerrado por un crimen completamente inútil y aberrante. Tal vez sólo aceleró la leyenda de Lennon, ¡pero qué más daba!

Fue hasta 2010, a sus 55 años, cuando el homicida dijo lamentarlo y sentirse avergonzado. ¡Demasiado tarde!