La revolución divide a las Fuerzas Armadas de Chávez

El ascenso a general en jefe de Henry Rangel Silva, quien dijo estar "casado" con el proyecto bolivariano, alertó a la cúpula militar, divida en "nacionalistas" y "chavistas"
El general Henry Rangel Silva, responsable del Comando Estratégico Operacional (CEO) del Ejército, se convirtió el jueves en General en Jefe, máximo grado militar en Venezuela, una semana después de sus declaraciones, lo que fue interpretado como una señal de respaldo por parte del presidente.


Ante la polémica desatada por sus afirmaciones, Chávez lo defendió asegurando que el compromiso del militar, a quien llamó "soldado revolucionario y bolivariano", era con un proyecto "de país" y no con una persona.
"Un golpe de Estado aquí es algo yo no digo imposible, sólo que el contragolpe nuestro también está previsto. Por eso, a ellos [los opositores] les duele tanto cuando el general Rangel Silva dice que los militares venezolanos están casados con este proyecto de país", insistió Chávez.
Como responsable del CEO, Rangel tiene como superiores jerárquicos sólo al ministro de Defensa y a Chávez, quien también es Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas y tiene la potestad de decidir los ascensos.
Para analistas y expertos en Defensa, la ascensión del oficial y sus declaraciones provocarán más tensiones en la institución castrense, donde persiste un grupo de "constitucionalistas" que se "aferra" a la Carta Magna en medio del polarizado ambiente político venezolano.
"Estamos asistiendo a una división clara de las Fuerzas Armadas entre los que son fieles a Chávez y los constitucionalistas, que están tratando de aferrarse a estos principios frente a la ferocidad con que actúa el Gobierno", declaró a la AFP la analista Rocío San Miguel.

"La Constitución es el único mapa en un país tan polarizado como Venezuela", insistió San Miguel, de la ONG Control Ciudadano.

Chávez, en el poder desde 1999, es un militar retirado, que en 1992 encabezó un fallido golpe de Estado contra el entonces presidente Carlos Andrés Pérez y que un decenio más tarde fue objeto de una intentona golpista que sólo duró 48 horas. (EFE)