Estados Unidos cierra el cerco sobre Khadafi

El Pentágono está reubicando sus fuerzas militares en el Norte de África. Se congelaron U$S 30.000 millones de activos libios. El líder "debe irse ya", sentenció Clinton. Unas 100.000 personas abandonaron el país
Como parte de las medidas de presión para que Muammar Khadafi ponga fin a su mandato de más de cuatro décadas, los Estados Unidos reubicaron sus fuerzas militares navales y aéreas alrededor de Libia, se informó en el Pentágono. A las restricciones de viaje para las autoridades locales (entre ellas, el mismo Khadafi), se sumó un bloqueo de 30.000 millones de dólares en activos libios, según el Departamento del Tesoro.

"Tenemos gente trabajando en la planificación y varios
planes de contingencia y creo que es seguro decir que, como consecuencia de ello, estamos reposicionando fuerzas para ser capaces de ser más flexibles para que una vez que sean tomadas las decisiones (...) poder dar opciones y flexibilidad", dijo el coronel David Lapan, un portavoz del Pentágono.


En paralelo, la secretaria de Estado, Hillary Clinton, anunció que EEUU enviará dos misiones humanitarias (alimentos y medicamentos) a los opositores que tomaron el control de la zona este del país.

El exilio del dirigente Muammar Khadafi es "una opción" para poner fin a la revuelta popular sin precedente que sacude a Libia, dijo este lunes Carney.
En una corta conferencia de prensa, Carney rehusó, de todas maneras, "especular" sobre la posibilidad de que los Estados Unidos contribuyan a ese exilio.
"El exilio sería una posibilidad para producir los cambios" reclamados desde hace dos semanas por los manifestantes en las calles de distintas ciudades libias, indicó Carney, reiterando que el coronel Khadafi debe "apartarse" del poder, como lo había dicho el sábado el presidente estadounidense Barack Obama.
Carney afirmó, además, que los Estados Unidos buscaban un contacto con los grupos de la rebelión en Libia, pero precisó que aún es "prematuro" evocar un reconocimiento de Washington para alguno de ellos.

Como consecuencia de esta situación, unas 100.000 personas abandonaron Libia hacia Túnez y Egipto. En el último fin de semana de febrero, unas 1.000 personas por hora cruzaron hacia Túnez, hasta totalizar unas 40.000 el lunes 28. Otras 60.000 llegaron a Egipto, según Valerie Amos, subsecretaria general de Asuntos Humanitarios de la Organización de las Naciones Unidas.

La funcionaria lamentó que la cifra de muertos llegara también a miles: "No hay un balance confirmado, pero las estimaciones oscilan entre centenares y miles".

infobae