
Residía en el barrio Palo Alto, en la colonia Kennedy, con sus padres Ignacio Durán, sargento del Ejército que labora en la seguridad del Metro de Santo Domingo, y Rosa Emilia Corona Monegro.
Al principio se creía que la menor había sido violada, pero los forenses determinaron que no.
Quiroz tuvo que ser trasladado anoche mismo a la cárcel de La Vega, escoltado por un fuerte contingente policial, debido a que desde que estuvo en el cuartel local, familiares de la víctima y vecinos rodearon el destacamento. Exigían justicia.
“Me siento dolorido, perdí una niña a la que quería mucho y quiero justicia para ese hombre que le quitó la vida. Quiero la pena máxima, aunque ya como quiera eso no me devolverá a mi pequeña. Él mató a una niña inocente a sangre fría”, dijo el sargento Durán.
La madre cree que su hija fue asesinada porque sabía alguna información que Quiroz no quería que fuera divulgada.
El hecho. Felipe Durán, tío de Ányeli, narró que su madre salió en la mañana muy temprano a trabajar en un jardín. La niña se quedó en su casa sola, momento que se cree fue aprovechado por Quiroz para penetrar a la vivienda y cometer el asesinato. El cuerpo fue encontrado por una tía de la víctima.
Tras cometer el hecho, Quiroz se fue a su casa, donde trató de ocultar su ropa, pero un abrigo ensangrentado que se le quedó en la habitación fue encontrado por su hermano, que lo entregó a la Policía.
Los vecinos dicen que padece demencia. Un señor mayor conocido solo como “San Pulli”, primer sospechoso, sigue detenido.
Escrito por: Wellington Díaz , Hoy.com.do